
Todas las noches escribo tu nombre bajo mi sábana.
Y la sábana ya tiene tu nombre escrito tantas veces que yo no sé si es sábana
o es tu nombre.
Todas las noches escribo tu nombre bajo mi sábana,
y tu nombre está tan vivo, que yo no sé si lo escribo yo o se escribe solo,
de vez en cuando leo lo que escribo y me doy cuenta de que no estás tan lejos,
estás en mi sábana.
Yo sé que estás lejos y que no estás bajo mi sábana y como quisiera que si lo
estuvieras para saber que no escribo tu nombre en vano todas las noches.
Todos vienen a mi recámara y me preguntan "¿Por que escribes tantas veces su nombre y en tantas formas? Deberías escribir algo distinto"
y yo respondo "Me gustaría escribir otras cosas, pero no sé escribir"